El Grupo Operativo apuesta por modelos de gestión agrupada en áreas de minifundio
- El problema de partida, según la Fundación Cesefor, es la situación de desarraigo, que genera la falta de gestión forestal
- Según apuntó Patricia Gómez, gerente de COSE “el monte lejos de ser un problema, es parte de la solución”
- El grupo ha diseñado una plataforma de la gestión rústica, que permite poner en contacto al propietario con los gestores forestales
- COSE presentó la segunda parte de la campaña audiovisual “El rastro rostro de la tierra”
Madrid, 7 de julio de 2021. El Grupo Operativo Prominifun celebró el pasado día 2 de julio la jornada “Gestión en el medio rural: Intercambio de experiencias y agrupaciones para la mejora de la producción forestal”, un encuentro dirigido a propietarios y profesionales agrarios y forestales, organizado por FAFCYLE (Federación de Asociaciones Forestales de Castilla y León), uno de los socios del proyecto junto a Cesefor, COSE, Agresta, Fora, Asociación de Ingenieros de Montes al Servicio de la Hacienda Pública y Universidad de Vigo.
Roberto Rubio, Jefe del Área Forestal de Cesefor y coordinador del GO Prominifun, abrío la jornada exponiendo el trabajo que han llevado a cabo en el Grupo Operativo. “Nos encontramos con el problema de partida de la situación de desarraigo y despoblación del medio rural que genera una gestión de baja intensidad, lo que conlleva una disminución de la productividad de territorio”, introdujo. Las particiones de la tierra por herencias y la propiedad desconocida o no actualizada se traduce en que las series de vegetación ocupan áreas cuyo objetivo productivo ya no es ni la agricultura ni la ganadería y ahora son un grave problema en relación con los incendios forestales, situación que se ve agravada en áreas donde el tamaño de las parcelas es muy pequeño y por tanto conformar y gestionar una explotación agraria o forestal es aún más dificultoso.
Así las cosas, desde Prominifun se han desarrollado varias acciones. La primera de ellas es una plataforma de la gestión rústica, que permite poner en contacto al propietario con los gestores forestales. La segunda consiste en el diseño de nuevos modelos de gestión forestal. “Proponemos modelos de gestión agrupada en estas áreas de minifundio”, apuntó Roberto Rubio.
En relación a uno de estos modelos, Carlos Gómez del Corral, responsable del Dpto. Técnico de la Asociación Forestal de Zamora-ASFOZA, habló del “Modelo de agrupación de propietarios en la comarca de la Guareña” (Zamora), unos trabajos que se realizaron en la zona hace diez años con un punto de partida muy difícil. “Muchos de estos terrenos llegan a sus propietarios por medio de herencias y el desconocimiento de su ubicación, la fragmentación y el desarraigo hace difícil la gestión. Hay algunos propietarios que no están interesados en el proyecto, pero nosotros estamos trabajando en ello, para llevar a cabo una agrupación con aquellos que sí tengan interés”, manifestó.
Por su parte, Miguel García Romero, responsable del Dpto. Técnico de la Asociación Forestal de León-ASFOLE, expuso cómo se lleva a cabo en el Bierzo la gestión conjunta en especies de crecimiento rápido (Pinus radiata). “Hemos intentado llevar una gestión de una forma más reglada, hablando con los propietarios e intentando realizar todas las labores selvícolas de manera agrupada”, explicó.
Roberto Rubio Gutiérrez habló en su ponencia sobre la plataforma de la gestión rústica; una herramienta que tiene como objetivo facilitar la gestión de la propiedad y que los propietarios pueden ver agrupadas sus parcelas, los interesados puedan buscar su alquiler, compra… “Se recogen las gestiones a nivel de parcela, explotación o gestión”, apuntó.
CAMPAÑA “EL RASTRO-ROSTRO DE LA TIERRA”
Patricia Gómez Agrela, gerente de la Confederación de Organizaciones de Selvicultores de España (COSE), fue la encargada de presentar el lanzamiento de la 2ª parte de Campaña Rastro-Rostro. “Con esta campaña lo que queremos mostrar es que detrás de un monte hay una persona o familia que lo cuida y mantiene. Una labor fundamental pero invisible”, recalcó.
En la primera edición titulada “Seis historias de personas y bosques”, se puso el foco en mostrar el rostro humano de esos espacios naturales bien conservados a través de seis testimonios personales de propietarios que nos cuentan cómo heredaron la propiedad, qué gestión realizan y los esfuerzos que hacen para que no se pierda el vínculo con la tierra. Ahora, en esta segunda, se han querido visualizar buenas “iniciativas que dejan huella” en el territorio; una huella verde, positiva para el medio rural y sus habitantes.
Actualmente están disponibles tres vídeos más (www.rostrotierra.com) donde se pueden conocer estas experiencias: la Agrupación de propietarios de fincas forestales de Onamio, el Banco de Tierras de El Bierzo y la Agrupación de propietarios del Castañar de Hoyos. “El minifundio dificulta la gestión y la rentabilidad forestal, por eso tenemos que prestar atención a estas zonas para que no caigan en el abandono”, recordó Gómez Agrela.
La jornada finalizó con la intervención de Ana Isabel Martos Torres, subdirectora adjunta de la Dirección General del Catastro. Ella fue la encargada de presentar la Unidad del Catastro para el Territorio Rural, un proyecto que presenta un plan estratégico con 15 líneas de actuación que pretende mejorar la organización, estructura y comunicación de la unidad y ser el motor de una “Revolución Invisible” acorde con las demandas sociales, ambientales y económicas que se demandan desde el Medio Rural.